martes, 21 de julio de 2009

Salió "La Voz de los laburantes" nº 3


Es hora de construir clasismo

Es histórico y ya bastante conocido, que el capitalismo se sostiene por la súper explotación de los trabajadores a nivel mundial, y en consecuencia, por la acumulación extraordinaria de riquezas por parte de unos pocos.
Así, cientos de millones de cuerpos se deterioran día a día, por esta lógica de que unos pocos quieren vivir del sudor de muchos. El capitalismo, y más precisamente los capitalistas viven del trabajo que no nos pagan, volviéndolo a reinvertir en su sistema, expandiéndolo más allá de las fronteras nacionales, es decir a nivel mundial, generando más y más explotación.
Por eso es que nos referimos tanto a súper explotación como acumulación extraordinaria, que crea capital financiero, tema central para comprender esta crisis. Éste último, es producto de la fusión del capital bancario, el capital industrial, el capital agrario y el capital energético. En criollo, bancos, fábricas y tierras.


Esta etapa del capitalismo es denominada imperialismo, caracterizado por monopolios mundiales, tanto económicos, políticos, culturales y militares. Estados Unidos representa hoy la síntesis de este sistema económico y político.
La actual crisis económica es principalmente de sobre producción y que… oh casualidad se generó en el gran amo del norte. Esto implica que las fábricas y empresas a nivel mundial tienen sobre abundancia de stock de mercancías. Es decir, no encuentran a quien vender sus productos, generando más desocupación también a nivel mundial.
En tiempos de crisis toda política de salvataje va a estar dirigida a salvar al capitalismo, por ende a los capitalistas. A los trabajadores sólo nos caerán migajas de la solidaridad entre los poderosos.
Nosotros en este sistema somos simple mano de obra que mantenemos sus ganancias, pero a la vez somos los creadores de las riquezas. Por eso compañeros si ellos tienen solidaridad de clase entre ellos, porque nosotros no construimos la nuestra.
La construcción de herramientas clasistas con la cual enfrentar a los socios locales del capitalismo (las patronales, el estado burgués y la burocracia sindical) es tarea de primer orden en cada lucha que desarrollemos los trabajadores.
El clasismo se construye creando lazos solidarios que se reflejen en acciones concretas con otras fábricas, otros trabajadores ocupados y desocupados, con los estudiantes en lucha, construyendo poder popular en los barrios.
Debemos romper con las divisiones y el individualismo que nos imponen para dominarnos. Entendiendo que los limites de nuestras fábricas no son los límites de nuestra lucha como trabajadores, como continuadores históricos de las grandes luchas emprendidas entre los años 60 y 70 en la Argentina, donde a través de la organización y la acción se puso a la burguesía contra las cuerdas.
Hoy, varios procesos pueden ser punta de lanza para el resurgimiento de la conciencia de clase que debemos saber desarrollar y multiplicar. Los compañeros de subte, organizados fuertemente desde las bases, pelean por la construcción de un sindicato que represente los intereses de los trabajadores con independencia del estado, de la patronal y la burocracia sindical. Los compañeros de la Coop. Textil Quilmes (ex Febatex), Envases del Plata, Disco de Oro, en unidad sostienen la ocupación de las fábricas, produciendo y resistiendo junto al barrio y los estudiantes.
Desde la Corriente Sindical Leandro Fote creemos necesario redoblar nuestros esfuerzos para la construcción de organizaciones clasistas con las cuales enfrentar al sistema capitalista, enemigo de todos los trabajadores.

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